Capacidad de análisis

Si tuviera que elegir la cualidad más sobresaliente del gran instructor de lanzado, en este momento no tendría duda.

No me quedaría con ninguna de esas características que aún siendo muy importantes, la mayoría de los instructores poseen en mayor o menor grado: calidad como lanzador, conocimientos técnicos, manejo del lenguaje….

Me refiero a una habilidad realmente complicada,

Preguntas trampa

Durante la prueba práctica del certificado de instructor de cualquier examen (EFFA, IFFF, AAPGAI, ADELAM…) los examinadores persiguen básicamente averiguar tres cosas sobre el candidato:

# Si es capaz de pasar con holgura cada una de las pruebas del examen.

# Si entiende a la perfección cómo se ejecuta.

Esos nerviosssss

Llega el día del examen y aunque nos hemos preparado bien y pasamos cada una de las pruebas con cierto margen, los nervios nos atenazan los músculos y el espíritu. Y lo que es peor, nos hacen perder confianza en nosotros mismos.

Desde luego ejecutar las pruebas solos en el césped y hacerlo con dos examinadores delante nuestra, con normalmente ceño fruncido y con mirada de análisis crítica y fustigadora son cosas diferentes. Cosas totalmente diferentes.

Dos pruebas con mucho peso

Son muchos aficionados al lanzado los que deciden cada año prepararse para alguna de las certificaciones que se ofrecen en el mercado. A ambos lados del charco y en un montón de convocatorias.

Yo soy de los que piensan que el viaje es más importante que el destino. Aunque también soy de los que defiende que tras un trabajado y arduo viaje, la mayor recompensa es una exitosa llegada.

No es casualidad que las dos primeras pruebas de cualquiera de los exámenes prácticos que se ofrecen sean casi las mismas, sin apenas variaciones.