
La TAPPA
Pasada la resaca de un fugaz pero intenso encuentro de lanzado en Huerta, quiero recoger algunas anotaciones técnicas interesantes a modo de recordatorio para todos los participantes.
Aunque no hubo más remedio, por cuestiones de número y espacio, que dividirnos en grupos, los instructores teníamos establecido cubrir el siguiente bloque de apectos mecánicos básicos:
Tensión / Aceleración / Parada / Pausa / Alineación
A partir de ahí y dependiendo del tiempo restante y dinámica del grupo, cada uno podía incluir la doble tracción, todo tipo de lances especiales, lances de presentación, speys y lances de salón.
La noche anterior al curso, los 4 instructores (Manuel, Roberto, Raul y servidor) y los dos magníficos asistentes de apoyo (José Manuel y Mikel), reunidos alrededor de una fantástica mesa poblada de viandas suculentas, acordamos que durante el curso deberíamos centrarnos principalmente en los aspectos esenciales del lanzado que todo aficionado debe entender, asimilar y llegar a dominar. A saber:
Tensión
Necesitamos una línea bien estirada tanto adelante como atrás para poder comenzar el lance. Un golpe de energía (rotación) aplicado a una línea arrugada, floja, caída no sirve de casi nada.
Aceleración
Constante. Sin saltos, ni variaciones, sin dudas o vacilaciones. Constante, con suavidad de manera uniforme durante todo el golpe de lanzado.
Parada
Una buena aceleración final debe terminar de la manera más rápida posible. Firmeza en un cambio de tensión claro y bien destacado del agarre de la caña. Nuestros nudillos se vuelven blancos. Hasta ese momento tenían mejor color.
Pausa
Que la línea se estire tanto atrás como adelante pero que no empiece a caer por efecto de la gravedad. Si el lance es largo ya irá cayendo la línea durante la fase de traslación irremediablemente. Que no lo haga durante la parada o tendremos problemas.
Alineación
Situados casi encima de la línea lateral de un campo de fútbol y lanzando sobre ella apuntamos al banderín de córner. A continuación, nuestro lance trasero debe apuntar al banderín de córner del otro extremo de esa línea de cal. Eso es alineamiento y la perfección en la misma es meta soñada, nada fácil de conseguir, para cualquier lanzador de distancia.
Y estos cinco puntos son la clave del lanzado moderno. Del antiguo también pero hace años no estaban tan claramente identificados, resumidos y unánimemente aprobados por todos los instructores del mundo. Ahora sí. Por cierto, forman un acrónimo para su rápida memorización: TAPPA.