
El pescador conservacionista
¡Qué canso se está volviendo este grupo al cual también pertenezco! Me explico.
Uno se vuelve pescador sin muerte cuando decide devolver todas sus capturas. Y acaba siendo un pelma cuando tras una captura y antes de su devolución acaba inmerso en este tipo de interacción comunicativa: ¿así bien?, mejor en esta posición, espera que se me escurre, prepárate que ya la tengo agarrada, cuida la luz, dispara ya, espera un poco… Con cada una de las piezas capturadas.
Me refiero, cómo no, al que normalmente va con un compañero armado con una cámara digital. Todavía es peor el que va solo y decide sacar la foto él mismo.
Ahí va la foto
El tinglado que se monta para con una mano la cámara, en la otra la trucha, la caña por aquí y el empeño que pone para que la foto no salga borrosa es de chiste.
Tendría gracia si no es por el hecho de que cuanto más alarguemos la devolución del pez menos probabilidades tiene de sobrevivir. Especialmente en verano con aguas más calientes y menor concentración de oxígeno disuelto.
Otro sello del conservacionista pelma es cuando pescando en aguas de alta montaña, tras varias capturas de piezas de no más de 20 cms. sigue clavando, peleando y trayendo hasta la mano una captura tras otra.
Venga, muchacho, ya las has visto, las has tocado y fotografiado diez veces, la siguiente es igual que la anterior. Intenta no clavar si ves que no supera el tamaño medio o afloja tensión en la línea a ver si se suelta sola.